Declaración del Servicio de Seguridad de Ucrania
Hoy en día, el espacio de información nacional está bajo una influencia sin precedentes. Ucrania se ha enfrentado a intentos de sistematizar el pánico, difundir información falsa y distorsionar la situación real. Todo esto en un complejo: nada y una poderosa ola de guerra híbrida.
El Servicio de Seguridad, dentro de su competencia, analiza constantemente varios escenarios, existe un plan de acción claro para cada uno de ellos. Junto con los líderes estatales, los representantes de los poderes ejecutivo y legislativo, y otras autoridades de seguridad y del orden público, estamos listos para responder a la situación. Y ya lo estamos haciendo.
Al mismo tiempo, entendemos perfectamente los motivos de la actual presión informativa: sembrar alarma en la sociedad ucraniana, socavar la fe en la capacidad del Estado para proteger a sus ciudadanos, sacudir nuestra unidad.
El Servicio de Seguridad de Ucrania (SBU) registra tales manifestaciones de guerra híbrida en las redes sociales, algunos medios de comunicación, en la difusión de narrativas del país agresor por parte de algunos políticos, etc. No solo los corrige, sino que también se opone activamente a ellos. Esto se refleja en las decisiones del Consejo de Seguridad y Defensa Nacional, el número de ciberataques neutralizados, la eliminación de numerosas granjas de bots, la exposición de las redes de inteligencia de los servicios de inteligencia extranjeros y la prevención de sabotaje y ataques terroristas.
Sin embargo, ahora la estabilidad y la paz en nuestro país dependen no solo del gobierno, sino también de las acciones equilibradas de cada ucraniano. Todos debemos mantener la calma y la calma, no sucumbir a las provocaciones. El pánico y la desestabilización benefician solo a los enemigos, no a Ucrania.
Todos necesitamos pensar críticamente y verificar cualquier información; guiarse por datos de fuentes oficiales, no anónimas; aprender a distinguir la verdad de las falsificaciones.
Y no olvidemos: la fuerza de Ucrania en la unidad de cada uno de nosotros.